Jade Nile llegó de la tienda muy contenta, se había comprado un montón de lencería nueva y quería enseñársela a su padrastro. El hombre tumbado en el sofá alucinaba con su hijastra. Sin ningún problema se quitaba y ponía la ropa, dejando al aire esas preciosas tetas naturales, su culito respingón y ese coño peludo que madre mía... Normal que el padrastro se calentara, no?